Estos días hemos ido de un sitio a otro sin mucho tiempo para escribir.
El viernes fuimos a nuestra primera clase como cada día y después nos fuimos a un colegio a hacer una exhibición. Vinieron con nosotros una chica y un chico del NIS que hacen un judo precioso.

Todo salió fenomenal, tan bien que cuando terminamos parecíamos estrellas del rock, tooodas las niñas encima pidiendo autógrafos en sus cuadernos, manos, haciéndose fotos, dándonos las manos… Al final las tuvieron que echar casi a empujones para que pudiéramos salir jajaja

Después de esta divertida experiencia fuimos a la 3 clase y tras ella al instituto. Las chicas del instituto son mayores, es mas bien una universidad, tienen todas más de 18 y es quizá la clase más complicada de las que vi aquí. La mayoría de chicas son muy muy tímidas y están ya muy metidas en su papel de mujer débil, sumisa, que habla bajito y no levanta la cabeza. Aun así es sorprendente como las clases de judo les cambian la postura, la forma de andar y les sacan la sonrisa.

Cuando terminamos, fuimos a comer y después (casi comemos y cenamos seguido) fuimos a un restaurante con todos los que están involucrados en el proyecto.
Llegamos muy tarde y el sábado teníamos nuestra primera clase a las 7*30. Aquí las niñas van a clase también los sábados. Así que el sábado madrugón, clase y luego vuelta al hotel para desayunar algo. De aquí al NIS para el clínic que habían organizado.

Tuvieron muchos detalles y regalos hacia nosotros. Por la mañana Sensei Feng dio una clase de defensa personal y por la tarde yo expliqué cómo trabajamos en España con los niños, muchos juegos, formas de hacer randori… Y cómo trabajo yo con los niños con discapacidad. Creo que les gustó mucho e incluso me invitaron a conocer otra ONG en Jaipur donde están deseando empezar a hacer judo.

También tuvimos ocasión de presentar el JudoMat, gracias a Iñaki de Durango Judo que muy amable y predispuesto me regaló dos para traerlos aquí. Les ha encantado.
Por último estuvimos mostrando unos ejercicios específicos de preparación física para judo que me habían pedido y que muy amablemente mi amiga y fantástica preparadora Beatriz Pereda diseñó y me ayudó a grabar y montar.

Al final entre hablar y cenar y tomar algo, volvimos muy tarde. Por suerte hoy domingo, tenemos un día más tranquilo. A la vuelta más detalles!